Super Smash Bros: Battles.
Simon Belmont vs Pacman y Megaman.
El Castillo de Drácula había surgido de nuevo. Tarde o temprano siempre ocurría y lo único que traía era miedo y pesadillas para cualquier desafortunado que habite en los alrededores. Su surgimiento venía acompañado de múltiples criaturas malditas, espantosas y oscuras, surgidas del mismísimo infierno, que atacaban a cuanto ser humano se encontraran en su camino.
La humanidad debía temerle a Drácula, eso era un hecho. Más sin embargo, los humanos contaban con un campeón para defenderlos. Pues a lo largo de los siglos, solamente un linaje fue capaz de frenar las ambiciones del demonio, una familia que parecía destinada a luchar contra las tinieblas para proteger a los seres humanos: El Clan de los Belmont.´
Personajes de leyenda, constantemente temidos y rechazados por sus vínculos con las artes oscuras, los Belmont siempre son la última esperanza en la supervivencia de la raza humana. Dispuesto a salvar el corrupto mundo en el que vive y honrar el juramento de sus ancestros, el último descendiente del clan, Simon Belmont, es quien se infiltró en las profundidades del castillo para zanjar de una vez por todas, su antigua enemistad con Drácula.
Desde luego, moverse en aquel laberintico lugar era un trabajo complicado. No solamente por lo confusa de su estructura y la multitud de caminos a seguir, sino también por los peligros mortales que aguardaban en cada rincón. Cada cuarto estaba repleto de monstruos y demonios sedientos de sangre y dispuestos a acabar con el cazador.
Solamente con ayuda de su legendario látigo, el Vampire Killer, Simon debía abrirse paso entre las habitaciones para llegar con su enemigo mortal y vencerlo de una vez por todas.
Fue así, como el valiente aventurero finalmente había llegado a la Clock Tower, estando ya muy cerca de la habitación de Drácula. Pero antes debía enfrentar al último obstáculo que se interponía en su camino, una oscura entidad, nacida del caos y el mal del corazón humano, la mismísima Death.
El espectro agitaba su guadaña, arrojando diversos cortes de energía demoniaca con el fin de arrebatar el alma a su contrincante, pero este esquivaba ágilmente cada uno de sus ataques. El combate se estaba extendiendo demasiado, pero Simon todavía poseía una amplia ventaja, misma que usó para arremeter una y otra vez con su látigo, arrojando a su espectral enemigo contra el suelo.
-¡Ríndete de una vez, espectro! ¡No hay ilusión que te salve en esta ocasión!- Advirtió el cazador.
Death estaba indefenso, había sido completamente derrotado y acabar con él sería sencillo. Pero necesitaba sacarle información, no sabía cuánto había incrementado Drácula sus poderes oscuros desde su última aparición y no podía darse el lujo de luchar en desventaja… Y ahí fue cuando las cosas se comenzaron a tornar extrañas.
Una extraña esfera amarilla con brazos y piernas se apareció de la nada, haciendo el sonido de "WakaWaka" y lo primero que hizo fue tragarse al indefenso Death de un solo bocado. Simon se quedó completamente sorprendido ante esta acción, pero no tuvo mucho tiempo para mantenerse en shock, pues alguien más había llegado a la habitación. Parecía un chico joven, pero tenía una extraña armadura azul y su brazo parecía alguna clase de arma extraña, por lo que estaba claro que no era un humano.
-¡Mira, Mega! No sé qué acabo de comer, pero estuvo delicioso.- Le comentó la esfera amarilla a su compañero azul.
-Será mejor que no seas descuidado, Pac. Este lugar es peligroso, impredecible y aterrador.- Recomendó el azul.
-Lo sé, pero hay muchos enemigos aquí que me puedo comer. Me siento en mi elemento.- Sonrió el amarillo.- De todos modos, debemos seguir avanzando si queremos acercarnos a la fuente de esa energía oscura que sentí cuando llegamos…
Pero mientras esos dos hablaban, Simon los analizaba. Utilizaba sus habilidades entrenadas para percibir que clase de energía espiritual emitían esos dos, en un intento de determinar si son una amenaza.
El azul era… ¿Extraño? No podía percibir ninguna clase de energía espiritual, demoniaca o vital en él, pero se movía con naturalidad, nunca había visto nada parecido. El amarillo por otra parte, era mucho más familiar, pues podía percibir en él una gran concentración de energía espiritual, una ciertamente extraña y antigua.
No había duda, eran sirvientes de Drácula, pero ¿por qué habían rematado a Death? ¿Acaso querían silenciarlo antes de que le revelara algún dato importante? ¿Se trataba de alguna ilusión para engañarlo? ¿O quizá devoró a su propio aliado solamente por haberle fallado? Era de esperarse, no existía la lealtad o el compañerismo entre los seres de la oscuridad.
-¡Sirvientes de Drácula, conozcan su destino!
Tras esa amenaza, el cazador de vampiros extendió su Vampire Killer para un ataque sorpresa, golpeando a los "seguidores de Drácula" con su Morning Star. El ataque pareció resultar efectivo contra la esfera amarilla, pues salió volando contra la pared, pero no pareció hacerle tanto daño al de armadura azul.
-¡Eso fue peligroso! ¡Todo en este castillo intenta atacarnos!- Se quejó el azul.- ¿Estás bien, Pac?
-¡Eres resistente, demonio! ¡Pero poseo los medios para derrotarte!- Le interrumpió el cazador.
Belmont ni siquiera se esperó a que el azul pueda verificar el estado de su compañero, pues lo atacó con múltiples latigazos seguidos, uno tras otro. Su enemigo recibió los golpes directos al principio, pero comenzó a esquivarlos cuando el daño comenzaba a acumularse. Sin embargo, por más que retrocedía, Simon no dejaría escapar a ningún sirviente de Drácula, por lo que no daba descanso.
-¡No tengo intenciones de pelear! ¡Por favor, detenga su ataque!- Imploró el azul.
-¡No me vas a engañar, engendro! ¡Los trucos de tu amo nunca funcionarán en aquel que posee sangre del linaje Belmont!- Respondió Simon sin cesar su ataque.
El cazador de vampiros era implacable y las marcas de su látigo comenzaban a notarse en su enemigo… Pero su ataque tuvo que parar en cuanto alguien le arrojó un hidrante en la cara. Aparentemente, la esfera amarilla se había recuperado y no parecía nada contenta.
-Quizá mi amigo no quiera atacarte, pero yo no me pienso quedar de brazos cruzados mientras nos amenazas con ese látigo.- Amenazó el esférico.
Antes de que el amarillento pueda realizar cualquier movimiento, Simon lo atacó con sus dagas arrojadizas. Su enemigo fue hábil, pues consiguió esquivarlas rebotando por todo el cuarto, cual si fuera una pelota. En un principio, esta acción confundió al rubio, pero cuando estaba por rebotarle encima fue interceptado por el Vampire Killer y azotado con furia contra el piso.
-¡DLN004, Guts Man! ¡Súper Arm!
El Belmont estaba a punto de rematarlo, pero se sintió atraído por una carga magnética de origen desconocido y terminó flotando en el aire, aparentemente sujetado por su enemigo azulado.
-¡Ten cuidado con él, Pac! ¡Según mi escaneo, se trata solamente de un humano!
-Te aseguro que los humanos no son tan duros, Mega.
-Vamos a intentar inmovilizarlo sin hacerle daño, Pac. Eso será lo mejor…
-¡No permitiré que me capturen, espectros! ¡Los venceré y luego iré por aquel a quien le han jurado lealtad!- Interrumpió el Belmont.
-¡Cuidado, Mega! ¡Se va librar de tu agarre!- Advirtió el redondo.
Antes de que Simon pueda liberarse, la tracción magnética lo expulsó con fuerza hasta estrellarlo en una pared. Afortunadamente consiguió recuperarse lo suficientemente rápido como para esquivar unas pequeñas esferas amarillas que le arrojaba su enemigo circular y contraatacó arrojándole un frasco de agua bendita encima.
-¡Esto es inflamable!- La esfera amarilla había comenzado a arder en las llamas místicas y Simon estaba por continuar con su ataque, pero…
-¡DLN00A, Time Man! ¡Time Slow!
Fue entonces cuando los movimientos de Simon se hicieron sorprendentemente lentos, como si estuviera siendo detenido en el aire, tardaba minutos en moverse lo que debería hacerlo en cuestión de segundos y no podía atacar. El responsable era aquel azul, probablemente el más peligroso de ese dúo demoniaco y de quien debía ocuparse primero.
-¡¿Qué clase de oscura brujería has provocado con tu magia negra?! ¡No puedo moverme!- Se quejó el Belmont.
-¡De prisa! ¡No resistiré mucho ralentizando el tiempo!- Declaró el azul.
-Tu solo retenlo un poco más, mis amigos Galaga se encargarán de él.
El amarillo sacó de quien sabe dónde extrañas figuras pixeleadas que Simon no reconoció y se las arrojó encima. Al estar siendo ralentizado por el tiempo, no pudo hacer nada para defenderse y lo golpearon una y otra vez. Pero cuando se terminó el efecto temporal, pudo fácilmente destrozar los pixeleados con su Vampire Killer y de pasó le arrojó una cruz en la cara al amarillo.
Solo entonces volvió su atención contra el azul, quien había transformado su brazo en una especie de arma extraña y estaba a punto de dispararla. Por fortuna, los reflejos de Simon estaban muy desarrollados y fue capaz de arrojarle una daga que pareció atascar su arma. Sin perder un solo segundo más, se deslizó por el suelo y arremetió con una patada en la cara, que hizo caer al azul de espaldas. Era el más peligroso y debía asegurarse de dejarlo fuera de combate antes de que vuelva a intentar otro de sus trucos.
-¡Se acabó, demonio! ¡Es hora de que recibas tu castigo!
-¡Mega Upper!
Estaba a punto de acabar con él, pero este lo sorprendió elevándose y conectándole un poderoso gancho al rostro que le resultó particularmente doloroso, como si lo hubieran golpeado con una maza de metal. ¿Acaso su enemigo era en realidad una armadura de acero encantada o alguna clase de Golem? Sea como fuera, su oponente aprovechó el tiempo en que estuvo atontado por el golpe.
-¡DWN023, Spark Man! ¡Spark Shock!
Eso fue todo lo que escuchó antes de sentir como una demoledora corriente eléctrica recorría todo su cuerpo y lo debilitaba de sobremanera. Esto pudo haber terminado con él, pero afortunadamente estaba acostumbrado a recibir ataques similares y pudo alejarse antes de que el daño fuera mayor. De inmediato comenzó a atacar con su fiel Vampire Killer desde una distancia más segura, pero está vez su enemigo no se quedó quieto a recibir latigazos.
-¡DWN044, Knight Man! ¡Knight Crush!
La armadura encantada comenzó a disparar misteriosas bolas con pinchos que bloqueaban los ataques del Vampire Killer al chocar con ellos. Había un choque de latigazos y pinchos entre ambos y era Simon quien se encontraba en una aparente desventaja por la dureza de los proyectiles. Las cosas empeoraron cuando el amarillo volvió rodando al combate y lo embistió en la espalda, como si fuera una bola de cañón. En lugar de conformarse solo con eso, el redondo lo sometió con varios puñetazos y patadas bastante dolorosos, al tiempo que el azulado frenaba sus latigazos y volvía a la normalidad.
-¡Ya casi lo tenemos!
-¡Aguanta un poco más, Pac! ¡DWN056, Turbo Man! ¡Scorch Wheel!
En ese momento, el azul comenzó a generar llamas a su alrededor, como si fuera obra de brujería, hasta formar una especie de rueda de fuego que arrojó con todas sus fuerzas, tumbándolo al suelo, mientras que el amarillo aprovechaba para rebotarle encima. Estaba recibiendo demasiado daño, pero no podía permitírselo, no podía sucumbir ante estos trucos de magia oscura.
-¡Por la memoria de mis antepasados! ¡No puedo perder este combate! ¡Debo derrotar a Drácula y cualquiera de sus esbirros aunque me cueste la vida!
Haciendo uso de su determinación más pura, el cazador sacó una espada y arremetió con varios tajos de ella, obligando al redondo a retroceder al no tener como defenderse. Por otra parte, cuando intentó golpear al azul, este lo contrarrestó invocando una espada de fuego, probablemente producto de más magia oscura.
-¡Tus oscuros trucos no te salvarán en esta ocasión! Quizá tengas también una espada, pero nadie está tan versado en el uso del arma con filo que… ¡Simon Belmont! ¡Aquel que ha sido entrenado desde su juventud para enfrentar a criaturas como tú!
-Es cierto, eres mejor espadachín que yo.- Admitió el azul.- Así que tendré que cambiar de arma. ¡DWN048, Yamato Man! ¡Yamato Spear!
La espada de fuego fue reemplazada por varios proyectiles que parecían ser puntas de lanza, estos tomaron por sorpresa al Belmont y lo hicieron retroceder un poco al recibir varias estocadas. La versatilidad de esa armadura encantada era impresionante, sin duda debía dominar niveles de magia bastante avanzados.
-¡Tranquilo, Mega! ¡Te enviaré un poco de apoyo aéreo!- Declaró el amarillento, mientras sacaba un alimento extraño que Simon nunca antes había visto y se lo tragaba de un bocado.- ¡Ahora veremos si mi Chocolate Alado hace efecto!
Para sorpresa de Simon, el redondo amarillo obtuvo una especie de casco con alas y se elevó por los aires, para luego caer en picada y patearle la cabeza. Intentó voltearse para derribarlo con su látigo, pero el azul aprovechó para conectarle varios proyectiles de energía, pelear con ambos al mismo tiempo era agotador.
Solo necesitaban un descuido para obtener la ventaja contra él y lo consiguieron cuando el amarillento volador le dejó caer un Hidrante encima y lo tumbó contra el piso. Estaba atontado por el dolor y sus enemigos no le permitirían descansar.
-¡Buen trabajo, Pac! ¡Llegó el momento de inmovilizarlo con mi siguiente ataque! ¡Magnetic Shockwave!
Tras pronunciar estas palabras, aquella armadura azul disparó una poderosa onda de choque que hizo temblar la habitación en que se encontraban. El propio Simon sintió como era consumido por aquella ola de pura energía magnética hasta acabar estrellándose contra los engranes de la Clock Tower.
-¿Es todo? ¿Ya lo vencimos?
Al principio la respuesta parecía obvia, pues Simon se sentía casi derrotado, había recibido tanto daño que no podía ni pararse y el dolor se le hacía insoportable… ¡Pero no podía decepcionar a sus ancestros! ¡Debía honrar su linaje! ¡Debía ponerse de pie!
-¡Imposible! ¡Se sigue levantando!
-No hay imposible para aquel que ha jurado proteger a la humanidad. ¡Cumpliré el destino que mis ancestros me encomendaron! ¡Así lo jura, Simon Belmont!
-¡Cuidado, Pac!
La advertencia para el volador amarillo llegó tarde, pues Simon comenzó a arrojarle varias hachas con las que fue capaz de tumbarlo y hacerlo caer en picada contra el suelo. Estaba concentrando todo su poder espiritual solamente para mantenerse en el combate, por lo que debía terminarlo lo más pronto posible. Cargó contra el aturdido amarillento al tiempo que hacía girar su látigo para terminarlo en el siguiente movimiento.
-¡No lo permitiré! ¡DWN074, Pump Man! ¡Water Shield!
La armadura encantada protegió a su compañero, bloqueando el ataque con una especie de barrera de agua que invocó con sus extraños poderes. Pero eso era justo lo que Simon esperaba que hiciera, pues ahora era un objetivo fácil para recibir su técnica más poderosa, una en la que utilizaría todo el poder espiritual que le quedaba.
-¡Grand Cross!
El gasto de todo su poder valió la pena, pues Simon tomó al azul por sorpresa y lo encerró en un ataúd, para luego elevarlo con su Vampire Killer e invocar un torrente de cruces cargadas en energía sagrada. Era un movimiento devastador que golpeó al azul de forma consecutiva, hasta que el Belmont agotó todo su poder espiritual.
Estaba claro que con ello había noqueado a su primer enemigo y solo quedaba ocuparse del segundo. Quizá se encuentre sin energías, pero Simon estaba confiado en que su oponente estaría en peores condiciones que las suyas y podría derrotarlo con su látigo. Se acercaba lentamente a él, cuando el amarillo… ¿Sacó una trompeta?
-No te confíes, amigo. Todavía tengo unos cuantos trucos guardados.- Advirtió el redondo.
-Es solo un farol.- Declaró Simon.- ¿Qué daño puedes hacerme con un instrumento musical?
La respuesta llegó con una desafortunada sorpresa, pues en cuanto el esférico tocó la trompeta, esta emitió agudas ondas de sonido tan potentes que lo dejaron paralizado y sin poder moverse. ¡Había caído en alguna clase de hechizo extraño!
Lo peor es que mientras estaba aturdido por el sonido, aquel amarillento sacó una pequeña bolita brillante de su mismo color y la devoró de un solo bocado. Solo con ello, obtuvo la energía suficiente como para levantarse nuevamente y hacerle frente.
-Lo siento, colega. Pero ahora que consumí un Power Pac Punto tengo acceso a nuevas habilidades y una de mis favoritas es el… ¡Electrochoque!
De pronto, chispas eléctricas comenzaron a surgir de las manos del amarillento y sin que Simon pudiera siquiera moverse para reducir el daño, fue impactado por cientos de voltios que recorrían su cuerpo. Si tuviera más energía, quizá podría escapar, pero la había agotado toda y ya no podía hacer prácticamente nada para salvarse de su cruel destino.
-Ahora solo debo atraparte en una de mis ondas Galaxian y todo esto habrá terminado.- Declaró victorioso el redondo.
-¡No puedes detenerme por siempre, demonio! ¡Recuperaré mis fuerzas y en cuanto lo haga…!
-Sostenlo firmemente, Pac. Tengo el método perfecto para inmovilizarlo.
La voz del azul sorprendió a Simon en gran manera. Estaba magullado y chispeante, pero todavía continuaba con vida. ¡Eso era imposible! ¡Cualquier criatura oscura que recibiera el Grand Cross terminaría con daño letal! ¿Cómo es que el azul había resistido un ataque creado para combatir a criaturas de su calaña?
-¡DLN065, Concrete Man! ¡Concrete Shot!
Parecía imposible, pero su enemigo le había disparado una extraña sustancia pegajosa que pronto comenzó a endurecerse hasta tomar una forma sólida alrededor de él, dejándolo completamente inmovilizado en el interior. Quizá habría podido romperla con su fuerza, pero ya no le quedaba, estaba completamente agotado. Había perdido la batalla y ahora estaba a merced de este formidable par de demonios.
-Está bien, criaturas. Simon Belmont admite su derrota. Haced conmigo lo que quieran, pero les advierto que habrá otros que se alzarán contra la tiranía de Drácula. Otros quizá tan fuertes como yo. Subestimar a la humanidad será el último error que cometerán…
-¡Oye! ¡Espera un segundo, compañero!- Le interrumpió el amarillo.- Ninguno de nosotros quiere hacerte daño.
-¿Entonces buscas tomar el control de mi mente? Quizá consigan someter mi cuerpo, pero nunca mi férrea voluntad. Simon Belmont prefiere morir antes que convertirse en un esclavo de Drácula, cualquier hechizo que intenten es inútil contra…
-¡Tranquilízate un poco, amigo! No queremos nada de eso.
-Es verdad, señor. Todo esto es un malentendido, nosotros no somos sirvientes de ningún Drácula, ni tampoco somos demonios o algo parecido.- Aclaró el azul.
-Buscan engañarme, lo sé. Pues si no son seres demoniacos… ¿Qué más pueden ser? ¿De dónde consiguieron tanto poder? ¿Cuál es su objetivo?
-Mira que eres testarudo. Mi nombre es Pacman y me encontraba en una misión para salvar a mi familia, pues fueron secuestrados por fantasmas. Entonces sentí una peligrosa energía oscura en este castillo y decidí venir a investigar para ver si encuentro alguna pista acerca del paradero de mi esposa e hijos.
-Y yo soy Megaman, el robot que lucha para preservar la paz. He venido aquí acompañando a mi amigo, para ayudarlo en su misión.
Al principio no se lo creía, pero conforme avanzaba su conversación, ese dúo terminó convenciendo a Simon de que no eran una amenaza, sino que se encontraban en una noble misión. De hecho, ni siquiera eran demonios o espectros, pues aquel que se hacía llamar Megaman era en realidad una especie de autómata extraño y el llamado Pacman era… Bueno, todavía no tenía idea que clase de ser era el amarillento.
Después de que se presentará y les dijera su nombre, hicieron una tregua y lo liberaron de la sustancia conocida como "concreto" en la que lo tenían atrapado. Se tomaron un tiempo para descansar y recuperar energías e incluso le ofrecieron una pequeña esfera amarilla que le devolvió todas sus fuerzas al comérsela.
Simon aún no estaba seguro de cómo había conocido a seres tan particulares, pero si estaba satisfecho, pues había encontrado a dos poderosos aliados en su lucha contra Drácula. Según las leyendas, su ancestro, el temerario Trevor Belmont, había tenido aliados valiosos durante su cruzada para ponerle fin a la oscuridad. Entonces, ¿por qué razón Simon no podría darse el lujo de obtener aliados que compartan sus ideales de justicia? No era necesario continuar solitario con su labor, pues ahora tenía toda la ayuda que necesitaba.
-La lucha será dura y peligrosa. ¿Aun así están listos para seguirme en la batalla contra Drácula?- Preguntó Simon.
-Por mí no te preocupes, amigo. Mis ancestros también pelearon contra fantasmas malvados.- Respondió Pacman con una sonrisa.
-Ya invoque a Eddie para recargarme con algunos tanques de energía. Estoy listo para entrar en batalla.- Aclaró Megaman.
De este modo, el trío de héroes ingresó a la habitación y se encontraron cara a cara con el mismísimo señor de las tinieblas. Este los observó sonriente, al tiempo que se levantaba de su trono, cubierto con su capa. Había comenzado una de las batallas más peligrosas que la humanidad nunca atestiguaría.
Fin.
Ganador: Megaman y Pacman.
Aunque usted no lo crea, en este capítulo tenemos enfrentados a tres de los más grandes personajes clásicos, de los invitados favoritos para Smash en representación de Namco, Capcom y Konami. Personajes tan apegados al NES y SNES que mucha gente pensaba que eran personajes de Nintendo debido a su indiscutible éxito. Esta clase de combates solo se pueden ver en Super Smash Bros… Y en este fic, por supuesto.
¿Dos contra uno? Sí, una verdadera sorpresa. En un principio quería dejar el combate solamente entre Pacman y Simon, como una especie de batalla entre cazadores de fantasmas y espectros. Sin embargo, pronto me di cuenta de que Simon era perfectamente capaz de lidiar con ambos enemigos a la vez y se me ocurrió que sería una buena idea enfrentar a estos tres íconos retro en una batalla más frenética.
Hace tiempo que quería hacer algún combate con más de dos luchadores, así que esta fue una oportunidad perfecta. Aunque con Megaman y Simon involucrados… No puedo evitar recordar a la infame serie del Capitán N (la cual comencé a ver después de que un lector me la recomendará en un review de otro fic), solamente faltaba Pit y probablemente Samus para ver enfrentado al plantel protagónico de esa extraña serie clásica xD.
Curiosamente, hace poco anunciaron que habrá otro Nintendo Direct en unos cuantos días. ¿Será que aprovecharán para anunciar a uno o los dos personajes DLC que faltan para Ultimate? Ciertamente sería genial y las expectativas están muy altas. Ya quiero ver cuáles serán, a ver si puedo darles un combate interesante en esta historia.
De todos modos, aprovechó para agradecer el apoyo de:
M.U.M.M: Bueno, Yoshi es un personaje muy versátil y Nintendo se aprovecha de eso xD.
Fox McCloude: Lo mismo conmigo, recién probé la saga Banjo Kazooie cuando ya se terminaba la generación del Wii, PS3 y X Box 360, curiosamente mi primer contacto con la saga fue la Secuela/Spin Off de GBA. A estas alturas, ya no veo límites con las inclusiones de Smash, ya no sé qué esperar de Sakurai xD. Romper la cuarta pared no es para nada sencillo, si lo haces bien puedes divertir al nivel Deadpool o Gintama, pero si lo haces mal, puedes arruinar una historia.
Neo Magician 96: ¡Pelea de huevos! Jajaja, se podría decir que Banjo sobreexplota un poco a Kazooie, sobretodo con eso de usarla como arma cuerpo a cuerpo. Con tanos regresos de personajes clásicos que tenemos a día de hoy, me sorprende que este dúo no pueda volver con un buen juego. No debes subestimar al buen Yoshi, ahí donde lo ves todo tierno, sigue siendo el depredador más peligroso del mundo de Mario, capaz de devorar a cualquier criatura que se encuentre xD. En cuanto a KoF XV… La buena noticia es que Chris regresó a completar su equipo, la mala es que nos retrasaron el juego hasta el 2022.
MightyMitch47: Jajaja, no vayas a perder el toque, amigo. Pues sí, Banjo y Kazooie son buenos en eso de romper la cuarta pared. De hecho, a Rare parece gustarle eso del humor referencial, las parodias, referencias y la interacción entre los personajes y espectador. Si no me crees, basta con ver a la ardilla Conker y el extraño humor que maneja.
Y eso es todo por hoy. Sin más que decir, me despido hasta el siguiente capítulo.