Super Smash Bros: Battles.
Popo y Nana (Ice Climbers) vs Red y su Charizard (Pokémon Trainer).
Trepar, saltar y escalar. No importaba que tan fría sea le temperatura o que tan alta sea la montaña, ellos la escalaban con toda la alegría del mundo. Había una razón por la que Popo y Nana eran conocidos como los Ice Climbers, ese par de esquimales se pasaban la mayor parte del tiempo trepando por heladas montañas que parecían infinitas.
¿Por qué razón escalaban? Unos pájaros gigantes les habían robado sus verduras y ellos las querían de vuelta. ¿Por qué esos pájaros les robarían las verduras? Los Ice Climbers no lo sabían y tampoco les importaba mucho. ¿Deberían aumentar la seguridad del almacén donde guardaban sus sagrados alimentos? Probablemente, pero Popo y Nana lo preferían así.
Cada que tenían que recuperar sus verduras se embarcaban en épicas y emocionantes aventuras en las montañas. Nunca sabían lo que encontrarían en la cima y eso les emocionaba…
-¡Adelante, Nana! ¡Ya casi llegamos!
Los esquimales escalaban con saltos sobrehumanos, destruyendo cualquier bloque de hielo que les bloqueara el camino con sus confiables martillos. Ya habían avanzado un buen trecho, por lo que Popo ayudó a su compañera a subir y ambos se quedaron observando el paisaje con una sonrisa.
-¡Es hermoso!- Nana veía el paisaje con bastante ilusión en su mirada.- Está vez sí que hemos escalado alto.
-Si así se ve ahora, imagina cuando lleguemos a la cima.- Ante el comentario de Popo, ambos esquimales comenzaron a reír juntos, imaginándose lo que encontrarían.
Popo y Nana tenían una filosofía que seguían al pie de la letra: A la hora de escalar una montaña, siempre debían visualizar la cima, pero no dejarían que eso los distraiga de disfrutar el camino. Les encantaba ver el paisaje y esa era una de las razones por las que se dedicaban a escalar.
-Ya casi llegamos a la cima, Nana.- Popo comenzó a saltar emocionado.- ¡Recuperaremos nuestras verduras!
-Eso esperó, muero de hambre.- Nana puso ojos llorosos mientras se frotaba el estómago.
-Pues escalar en la nieve siempre habré el apetito…- Suspiró Popo.- Pero solamente tenemos que usar nuestros martillos para vencer a esos pájaros y tendremos nuestras verduras de vuelta.
Sonriéndose mutuamente, los Ice Climbers regresaron a su escalada, rebotando de piedra en piedra. Conforme iban subiendo, la ventisca empeoraba cada vez más y el frio aumentaba. Claro, Popo y Nana no tenían ningún problema con un poco de hielo, pero lo que de verdad les perjudicaba era la vista. Apenas y podían ver lo que había encima de ellos con la ventisca de nieve bloqueando su rango de visión. Por si eso fuera poco, el viento era tan fuerte que debían cuidarse de no ser arrastrados por él.
-¡Aguanta, Nana!
Los Ice Climbers se impulsaban el uno al otro con una soga, resistiendo los vientos helados. Solo debían resistir un poco más, ya estaban cerca de la cima… Pero una sombra pasó volando junto a ellos.
-Popo, ¿qué fue eso?- Preguntó una confundida Nana.
-Eh… ¿El pájaro que nos roba las verduras?- Respondió Popo con cierta incertidumbre.
-¿Tú crees?- Nana no parecía muy convencida.
Sujetándose de una cornisa, Popo hizo su mejor esfuerzo para observar aquella sombra. Era difícil distinguirla entre la ventisca, pero entrecerrando sus ojos, el esquimal pudo ver una silueta, que extendía sus… ¿Alas?
-¡Tiene alas! ¡Debe de ser el pájaro!- El esquimal se volvió hacía su compañera.- ¡Rápido, Nana! ¡Impúlsame!
Siguiendo las instrucciones de su compañero, Nana jaló la cuerda, impulsando a Popo lo suficientemente alto. El esquimal se acercaba cada vez más a aquella sombra y una vez que estuvo lo suficientemente cerca, la tomó por sorpresa con un martillazo.
Al caer tras su ataque, Popo se dio cuenta que se encontraba en la cima de aquella montaña, por lo que ayudó a su compañera a subir y ambos comenzaron a dar saltos de alegría… Al menos hasta que Nana notó algo inusual.
-¡Popo! ¡Mira ahí!- La expresión asustada de Nana confundió a Popo.- ¡Creo que no era un pájaro!
El esquimal se volteó, encontrándose frente a él a una criatura enorme e imponente. Nana tenía razón, no era un pájaro del todo, de hecho parecía una especie de dragón. Era gigantesco, de color naranja, con alas afiladas y grandes colmillos que le daban un aspecto aterrador.
Por lo visto estaba furioso por el martillazo que le habían dado, pues emitió un rugido de advertencia y comenzó a lanzar fuego por los aires. Asustada, Nana abrazó a Popo y ambos comenzaron a temblar.
-¡¿Qué es eso?!- Exclamó Nana, asustada.
-¡¿Un dragón?!- Popo intentaba ocultar su sorpresa, pero era imposible.- ¡No creí que nos encontráramos un dragón!
-¡¿Qué vamos a hacer, Popo?!- Preguntaba jalando el abrigo de su compañero.
-¡No te preocupes!- Respondió Popo, intentando sonar confiado.- ¡Solo hay que golpearlo con el martillo!
-¿Tú crees?- Preguntó una vez más.
-¡Mientras estemos juntos, somos invencibles!- Exclamó el esquimal ofreciéndole una sonrisa.
-¡Vamos, Popo!- Nana le devolvió la sonrisa y ambos levantaron sus martillos en conjunto, amenazando al dragón.
Antes de que la criatura pueda reaccionar, ambos esquimales comenzaron a girar sobre sí mismos, con sus martillos, como si de un par de tornados gemelos se tratasen. Ambos lograron golpearlo en el estómago al mismo tiempo, haciéndolo retroceder.
-¡No hay que darle descanso!
Antes de que el dragón pudiera recuperarse de los martillazos, los esquimales extendieron sus manos al frente y lanzaron una ráfaga de nieve. En un inicio parecía que su ataque estaba siendo efectivo, pues el dragón tenía que cubrirse con sus alas y ya lo estaban enterrando en nieve. Pero en ese momento…
-¡Charizard, usa Lanzallamas!
Una voz se escuchó entre la nieve y al oírla, el dragón arrojó un potente aliento de fuego. Sus llamas traspasaron la nieve que los Ice Climbers arrojaban, por lo que los esquimales tuvieron que saltar para esquivarlo.
-¡Popo! ¡Alguien le dio instrucciones a ese dragón!
-¡Quién quiera que sea, revélese!- Exigió Popo.
En ese momento, pudieron ver otra silueta en medio de la ventisca, aunque en esta ocasión parecía una silueta humana. Cuando el dragón se acercó a dicha silueta, el fuego de su cola la hizo más distinguible. Se trataba de un extraño chico, parado como si nada en la cima de aquel nevado. El chico vestía completamente de color rojo, sujetando una extraña esfera con una mano, mientras que con la otra se acomodaba su gorra. La gorra le tapaba los ojos, pero Popo y Nana pudieron distinguir una sonrisa arrogante en medio de aquella ventisca.
-¿Quién eres tú?- Preguntó Nana.
-…- Esa fue la única respuesta que recibieron de aquel enigmático personaje. Por lo visto era alguien de pocas palabras.
-No entiendo quién es él…
-¡Charizard, usa Envite Ígneo!- Ordenó el chico misterioso.
-¡Por lo visto sí puede hablar!
El dragón, que ahora conocían como Charizard, comenzó a volar a toda velocidad mientras se cargaba en llamas y casi los embiste. Ambos esquimales consiguieron esquivarlo, pero fue muy a duras penas. Los Ice Climbers estaban preocupados, nunca habían luchado contra algo semejante. Aun así, sabían que mientras se mantuvieran unidos podrían vencer a ese chico y su dragón mascota.
-¡Ahí vamos, Nana!
El dúo comenzó a arrojar bloques de hielo, que se deslizaban por el suelo hasta golpear al dragón y causarle algo de daño.
-¡Vuela!- A la orden del muchacho, Charizard se elevó en medio de la ventisca y avanzó volando contra los esquimales.- ¡Golpe Roca!
-¡Nana!- Exclamó Popo al ver que el dragón se les acercaba.
-¡Entendido!- Respondió la esquimal, comprendiendo las intenciones de su compañero.
Al ver que el dragón se acercaba, con su puño brillando para atacarlos, Popo dio un brinco con gran potencia de salto y contraatacó con su martillo, chocando ambos ataques. El esquimal luchaba para mantener su ataque, pero el dragón tenía demasiada fuerza y su martillo estaba retrocediendo ante esa potencia. Afortunadamente, Popo tenía una compañera en la que confiaría su vida… Literalmente.
-¡Allá voy!
Nana aprovechó el choque entre ambos movimientos y extendió su brazo, liberando una pequeña ventisca. Usualmente no le habría causado mucho daño a Charizard, pero la chica apuntó directamente a sus alas, llenándolas de nieve y causando que el dragón pierda el equilibrio, desplomándose en picada contra la nieve.
-¡Ahora!
Antes de que pueda levantarse, Popo y Nana le saltaron encima, moliéndolo a golpes con sus respectivos martillos. No lo dejaban moverse y cada que lo intentaba, le rompían bloques de hielo en la cabeza.
-¡Lanzallamas, Charizard!
En un intento desesperado, ese Charizard comenzó a disparar fuego de su boca, aunque no podía atinarle a los escaladores. Lo que sí podía golpear era a la nieve debajo de él, creando una neblina que les bloqueó la vista.
-¡No veo nada!- Se quejaba la escaladora.
-¡Resiste, Nana!
Aprovechando el momento, Charizard consiguió quitárselos de encima y aunque lastimado, lo que más denotaba era furia. Si su mirada de enojo no lo ponía en evidencia, el rugido y la ráfaga de llamas que arrojaba lo dejaban en claro.
-¡¿Qué haremos ahora, Popo?!- Nana miraba suplicante a su compañero.
-¡No podemos rendirnos, Nana!
-¡Ataquémoslo juntos!- Propuso la chica.
-¡Sí! ¡Juntos!
Ambos escaladores se tomaron de las manos y arrojaron una ventisca bastante poderosa, mucho más fuerte que las que hacían individualmente. Charizard intentó resistirla, pero incluso él retrocedía ante el viento helado que comenzaba a congelarle las alas. A lo lejos, el chico misterioso pudo sentir el viento y se sujetaba la gorra para que esta no salga volando.
-¡Vamos, Nana! ¡Confió en ti!
-¡Adelante, Popo! ¡Combinemos nuestras fuerzas!
Los Ice Climbers incrementaron la potencia de su ventisca, hasta no poder más. Finalmente, quedaron agotados y tuvieron que detener su movimiento mientras respiraban con cansancio. Esperanzados, levantaron la cabeza para ver a su enemigo y… Se encontraba congelado, atrapado bajo gruesas capas de hielo: Habían ganado.
-¡Sí! ¡Lo hicimos!
Ambos esquimales estaban realmente contentos, por lo que chocaron los cinco en señal de victoria. Tan felices estaban, que no notaron cuando el chico silencioso de la gorra roja se acercó algunos pasos, no hasta que este volvió a hablar.
-Charizard.- Exclamó, llamando la atención de todos.- Usa Envite Ígneo.
De repente y para terror de los Ice Climbers, el hielo comenzó a sobrecalentarse, hasta quedar al rojo vivo. En ese momento, el hielo estalló en pedazos y Charizard fue libre. Lo primero que hizo fue embestir a los esquimales mientras todavía estaba cargado en llamas y solamente pudieron evadirlo gracias a su potencia de saltó.
-¡Bien hecho!- Felicitó el silencioso a su dragón.- ¡Ahora, Mega Evoluciona!
De repente, el chico sacó una extraña pulsera, la cual comenzó a brillar, al mismo tiempo que Charizard. Tanto el silencioso como su dragón, emitieron lazos de energía, los cuales acabaron conectándose.
Por unos segundos, los Ice Climbers se maravillaron ante el juego de luces resplandecientes, pero su asombro se convirtió en terror cuando vieron que tras esas luces, la piel del dragón se había tornado color negra, aumentó su tamaño y cambió su aspecto en algo más intimidante.
-¡Popo!
-¡Corre, Nana!
-¡Anillo Ígneo!- Ordenó el silencioso.
Lo siguiente que los esquimales pudieron ver fue una explosión de fuego, una lo suficientemente grande como para consumir la cima de la montaña, con ellos incluidos. No supieron muy bien lo que paso a continuación, pero cuando se dieron cuenta de lo que pasaba, notaron que el cuerpo les dolía bastante y estaban en el interior de un enorme cráter causado por la explosión. Popo ayudó a Nana a salir de aquel cráter, ambos quejándose del dolor, hasta que alguien se les acercó.
-Buen combate.- El chico de rojo se acercó a ellos y les extendió la mano. Ambos esquimales estaban confundidos. Luego vieron como Charizard se acercaba a ellos y al ver que ambos se asustaron, el muchacho sacó una pequeña esfera de color blanco y rojo, la cual absorbió al enorme dragón. Una vez absorbido, el silencioso guardó la esfera en su cinturón.
-¿Cómo es que algo tan grande entró en esa pelotita?- Preguntó inocentemente, Nana.
-…- Esa fue la respuesta del chico, quien sacó otra esfera de su cinturón y la agrandó. Esto claramente causó el pánico en los Ice Climbers.
-¡Rápido, Nana! ¡Antes de que liberé a la criatura!
Pensando de forma rápida, los Climbers extendieron sus manos al frente y crearon una poderosa ventisca que golpeó al chico de rojo a quemarropa. Tan fuerte fue el viento que lanzaron, que la esfera de aquel chico fue arrastrada por la ventisca y acabó rodando por la montaña.
-¡Mi Pokéball!- El de rojo hizo un esfuerzo para soportar el frio y recoger su esfera, pero antes de que pueda lograrlo, Nana lo golpeó con su martillo en la cabeza. Luego de ello, la chica suspiró, aliviada de que todo había terminado.
-¿Estará bien?- Preguntó Popo.
-Mmm… Supongo que despertará en un par de horas.- Respondió Nana, mientras observaba al chico inconsciente en medio de la nieve.- El rojo es un color diabólico, por eso prefiero el rosa.
-Lo que yo preferiría es irnos de aquí y no estar para cuando él despierte.
Siguiendo el sabio consejo de Popo, los Ice Climbers se alejaron del lugar, brincando por las montañas hasta alejarse lo suficiente de aquel misterioso sujeto vestido de rojo.
-Oye Popo…
-¿Qué ocurre, Nana?
-Todavía tengo hambre. No encontramos las verduras.
Y así, ambos escaladores se perdían de vista entre los fuertes vientos helados de la montaña, con sus estómagos rugiendo al unísono y la esperanza de encontrar algo para comer. Al menos habían confirmado su teoría: Nunca sabes lo que te esperará en la cima de una montaña.
…
Y a los pies de aquella gigantesca montaña, junto a lo que parecían los restos de una Pokéball rota en pedazos por haber caído desde tan alto, se encontraba un extraño animal, observando el paisaje a su alrededor.
-¡Donkey Kong!- Ese fue su grito triunfal por haber alcanzado finalmente su libertad.
No sabía cuánto tiempo había estado atrapado en el interior de aquella bola extraña, ni tampoco sabía cómo es que consiguió liberarse o dónde se encontraba aquel niño tan extraño que lo capturó. Pero aun sin estas respuestas, Donkey Kong estaba realmente contento por recuperar su libertad.
El tiempo que pasó con aquel niño le resultó difícil. Cada que lo dejaba salir de aquella bola era solo para pelear contra animales monstruosos de poderes extraños… Excepto por una vez que lo sacó para que un anciano raro lo analicé por ser de una "nueva especie".
Ahora que estaba libre, finalmente podía volver a casa en la Isla Kongo. Podría reunirse con sus amigos y contarle a Diddy acerca de esta peculiar experiencia mientras comían unas deliciosas bananas. Aunque para volver a su hogar, primero tenía que resolver un pequeño detalle…
-¿Dónde bananas se supone que estoy?
¿Fin?
Ganador: ¿Charizard?
Estamos de vuelta con otro combate. En esta ocasión, un enfrentamiento entre aquellos héroes de Smash Bros que disfrutan de estar recluidos en la cima de montañas congeladas. Como habrán notado, esté capítulo se conecta directamente con el tercer capítulo del fic y resuelve la duda que muchos tenían acerca del destino del buen Donkey Kong.
Escribir de los Ice Climbers fue muy divertido, me encantan esos dos esquimales. Son de esos personajes con los que cualquiera que juegue Smash Bros acaba encariñándose. Una pena que no pudieron llegar al Smash de Wii U, pero al menos tuvieron su triunfal regreso en Ultimate. Esperemos que se queden para los futuros Smash.
Entonces, ¿por qué solo apareció Charizard en lugar de Squirtle e Ivysaur? Pues eso es porque en el Smash de Wii U y 3DS, Charizard salió como un personaje independiente, sin Red ni sus compañeros Pokémon, así que se me ocurrió que sería buena idea darle al inicial de fuego su propio capítulo (por eso fue que Charizard no fue utilizado en el Red vs DK).
Y bueno, aprovecho para agradecer los reviews de:
Martiz SG: Una idea interesante, no se me había ocurrido usar a los trajes Mii. Anotado la pelea de disfraces.
MightyMitch47: Cierto, el anime de Pokémon siempre tiene sus influencias en Smash Bros, por lo que es divertido usar elementos del anime en el fic. Jaja, me alegra que el capítulo haya quedado como una épica literaria, esa era mi intención para aprovechar la esencia de Fire Emblem. Muy bien, anotada la idea de un Megaman contra Pacman.
Fox McCloude: Jajaja, es cierto, Ridley parece más un pterodáctilo, aunque siendo un reptil volador que lanza fuego, lo tomé como un dragón. Enfrentar a todas las armas legendarias al mismo tiempo es casi un suicidio, a ver cómo sale Ridley de ese problema xD. Vaya problema con el cambio de nombre en las traducciones, hacen las cosas muy confusas a la hora de escribir fics.
KL Kid: Un Bad Ending o algo así… Roy está acostumbrado a la guerra, pero Ridley es un conquistador de planetas. Al menos Roy tiene muchos aliados para apoyarlo. Anotada la sugerencia de Ryu y Cloud.
Neo magician 96: Una guerra al más puro estilo de Fire Emblem, aunque Ridley tenía ventaja en el triángulo de armas xD. ¿La madre de Roy? ¿Quién podrá ser? Todo un misterio… Na, la verdad yo casé a Eliwood con Ninian, así que ahí tienes a la madre de Roy xD. Sería interesante ver un KoF XV con personajes invitados, tomando en cuenta que SNK está prestando sus personajes a otros crossover. Aunque incluyeron a Thief Arthur y Skullo Mania como invitadas al SNK Heroines, así que quien sabe si harán algo parecido en KoF XV. ¿Una batalla de piratas? ¡Anotada como siguiente sugerencia! Jaja, sería interesante un Smash Bros vs Shonen Jump para ver a Ridley contra el Dragón Negro de Ojos Rojos.
ZaBalor25: Quería hacer un combate inesperado con Roy y Ridley, creo que lo logré jaja. De cierta forma, tanto Roy como Ridley tenían ventajas en ciertos aspectos, pero fue el pirata espacial quien se llevó la victoria. En esta ocasión ganó el personaje frio y malvado.
Y bueno, supongo que eso es todo. Sin más que decir, me despido hasta el siguiente capítulo.